Después de una explosiva irrupción en la escena hard rockera de finales de los años 80, Guns N’ Roses se propuso ingresar en la década de los 90 con un proyecto por demás ambicioso: un disco doble. Sumándole grandilocuencia a las furiosas distorsiones de sus primeros discos, los “Use Your Illusion” le abrirían las puertas del cielo musical a la banda estadounidense, para ubicarlos, con razones valederas, entre las bandas de rock más importantes de la historia.
El camino no se mostraba allanado para la banda, ya que en 1990 decidieron por primera vez modificar su alineación original, aquella que conformaban Axl Rose en voz, Slash e Izzy Stradlin en guitarras, Duff McKagan en bajo y Steven Adler en la batería. Justamente el percusionista sería el elegido para abandonar el barco de Guns N’ Roses cuando buscaban darle forma al nuevo disco. Las adicciones de Adler eran tema de discusión en el seno de la banda, quienes también lidiaban con los excesos. “Steve no quería reconocer su problema, y fue muy difícil para nosotros enrostrárselo. Simplemente, no gozaba de todas sus facultades; no podía mantener un equilibrio entre sus excesos y su rendimiento a nivel laboral”, comenta Slash en su autobiografía sobre la decisión de la banda de apartar a Adler y buscar un reemplazo. El elegido fue Matt Sorum, baterista con pasado en The Cult, y junto a él se sumaría Dizzy Reed en teclados, pasando a darle la forma de sexteto a la agrupación.
Ocupando tres estudios diferentes para su grabación y con la producción nuevamente de Mike Clink, Guns N’ Roses se disponía entonces a darle forma a su nueva obra. Este trabajo dio sus primeras puntadas compositivas en fugaces reuniones entre los músicos de la banda, aún con Steven Adler entre las filas: “Duff, Steven, y yo zapamos con Izzy en un par de canciones, y en esos momentos, aquella vieja energía regreso; y todo se volvió muy excitante y eléctrico. Nos juntamos todos en mi casa y compusimos más de la mitad de los dos ‘Illusion’ con guitarras acústicas, literalmente, en dos noches. Empezamos trabajando sobre las canciones que teníamos guardadas de los viejos tiempos y que nunca habíamos hecho nada con ellas. Modificamos la intro de ‘Back off Bitch’ y de ‘Dont Cry’”, recuerda Slash. Al respecto del último tema mencionado (citado por Axl como el primer tema compuesto por Guns N’ Roses), este terminaría conformando una trilogía de cinematográficos videos junto a las épicas “November Rain” y “Estranged”, las cuales presentan algunos de los momentos musicales más notables de la banda a nivel compositivo.
“November Rain”, uno de los máximos éxitos de la banda, también estaba en las gateras desde hacía ya largo rato: “Habíamos planeado incluirla en ‘Appetite’ pero como teníamos ‘Sweet Child O’ Mine, se decidió por mayoría que no necesitábamos otra balada”, comenta Slash sobre aquella decisión momentánea de postergar la canción, que originalmente era incluso más larga en sus primeros demos, llegando a los 18 minutos.
“Don’t Cry” contó con la colaboración de Shannon Hoon, vocalista de Blind Melon y amigo personal de Axl Rose. “Estranged”, el último eslabón de la tríada, es quizás el punto más alto de estos dos álbumes en materia compositiva. Los teclados, la voz y las melodías de guitarra fluyen al unísono en esta melancólicamente genial canción. “Habíamos perdido un poco esa cosa caótica o de punk rock, ese sentimiento de crudeza, descontrol, y espontaneidad. En cambio, ahora sonábamos más épicos, sólidos y grandes”, recuerda Slash sobre el notorio cambio sonoro encontrado en esta fase de la banda.
Sin embargo, la potencia hard rockera que caracterizó a Guns N’ Roses en sus inicios seguía estando presente en gran parte de los discos. El primero de estos elementos a destacar es, por supuesto, la enorme “You Could Be Mine”, una bomba sonora que roza el heavy metal y se ubica entre lo más destacado del rock pesado en las últimas décadas, inmortalizado además por su inclusión en el mega exitoso film “Terminator 2”. También rememoran el sonido “Appetite for Destruction” canciones como “Right Next Door To Hell”, “Perfect Crime”, “Garden Of Eden” o la excelente gema oculta que es “Double Talkin’ Jive”.
Izzy Stradlin y Duff McKagan se ocupan en estos discos de la voz principal por primera vez en la discografía de la banda, con la mencionada “Double Talkin’ Jive”, “Dust N’ Bones”, “14 Years” y “You Ain’t the First” a cargo del guitarrista rítmico y “So Fine” por parte del bajista. Al respecto de estas canciones, se destaca el ritmo blusero de “Dust N´ Bones”, tan enraizado en el ADN de sus guitarristas, así como la brillante lírica de “14 Years”, una introspección compositiva escrita por Stradlin. Dentro de las novedades también se destacan la inclusión de armónicas (a cargo de Michael Monroe de Hanoi Rocks) para Bad Obsession, un rocanrolero guiño Stone, y el sitar que le otorga exotismo a la introducción de “Pretty Tied Up”. El sonido funk se hace presente en “Bad Apples”, así como el vértigo toma protagonismo en “Shotgun Blues”.
Los “Use Your Illusion” contienen también dos covers que se convirtieron en clásicos de la banda a partir de entonces, “Live And Let Die”, de Paul McCartney, y “Knockin’ on Heaven’s Doors”, de Bob Dylan. El grupo se permite cargar contra sus enemigos de la prensa en “Get In The Ring”, donde periodistas musicales son nombrados explícitamente, lo que derivó en posteriores demandas millonarias. “Locomotive” y “Breakdown” apuestan por los cambios de ritmo y la duración extensa, mientras que “Back Off Bitch” o “Don’t Danm Me” recuerdan al Guns N’ Roses primigenio donde los poderosos riffs de guitarra copaban la escena. “The Garden”, otro de los temas que había sido relegado desde años anteriores, cuenta con la colaboración de uno de los ídolos de la banda: Alice Cooper. Este último fue compuesto junto a West Arkeen, amigo del grupo desde sus inicios, y que también colaborase en la escritura de “Yesterdays”, una de las mejores baladas dentro dos álbumes repletos de excelentes temas lentos.
“Civil War” (único tema grabado por Adler) se reparte entre la lírica más política de Guns N’ Roses y una sublime demostración de la utilización del pedal de wah por parte de Slash a lo largo de los 4 solos presentes en el tema, con clara influencia de Jimi Hendrix, quien sería tributado en las presentaciones en vivo de esta canción. “Dead Horse” otorga un aire country con su introducción acústica (tocada por el mismo Axl Rose), y despliega una enérgica canción rockera que la ubica entre lo más destacado del primer “Illusions”. “Coma”, por su parte, es quizás la más pura colaboración entre Axl Rose y Slash en toda la discografía de la banda, ya que la música es integra obra del melenudo guitarrista y la letra del cantante, dando lugar a una mastodóntica canción de más de diez minutos repleta de cambios de ritmos y furiosos riffs heavy, intercalados con una etérea lírica sobre la propia experiencia de Rose luego de una sobredosis: “Acabé en el hospital, pero me gustaba eso de no tener que luchar más, y estaba completamente consciente de que me estaba yendo. Y de repente me dije a mí mismo: No hiciste demasiadas giras, la gente olvidará el disco, tenés mucho que hacer, y eso me hizo despertar”, comentaba Axl Rose, quien pudo despertar y descubrir que las ilusiones de Guns N’ Roses de llegar a la cima del mundo del rock fueron concretadas. Y con creces.
El legado de los “Use Your Illusion I & II”, de Guns N’ Roses:
Los “Use Your Illusion” fueron un éxito absoluto en materia comercial, tal es así que alcanzaron los puestos 1 y 2 de los rankings estadounidenses en la primera semana de sus lanzamientos. El éxito por supuesto tuvo repercusión a nivel mundial, donde Guns N’ Roses alcanzó una popularidad pocas veces vista para una banda de rock, permitiéndoles girar alrededor del globo en una extensa gira mundial de más de dos años.
Los discos entregaron algunos de los temas más reconocidos, no solo de Guns N’ Roses, sino de toda la música popular contemporánea, tal es el caso de canciones como “November Rain” o “You Could Be Mine”. “Don’t Cry”, “Civil War” o “Estranged”, son algunos de los otros éxitos destacados dentro de dos obras repletas de hits.
El doble álbum catapultó definitivamente a la banda al olimpo histórico del rock mundial, siendo considerados comúnmente como la última gran banda de rock a partir de su lanzamiento, y particularmente Axl Rose y Slash alcanzaron el status de estrellas globales de la música.