En el 2000 Disturbed gritaba más fuerte que Tears for Fears

tiempojoven

¿Qué tienen en común una banda de New Wave con una de Nu Metal? Posiblemente nada, pero a inicios del nuevo milenio ambos géneros se rozaron, al menos por un rato.

Hacia fines de 1984 y principios del 85´, Tears for Fears, el dúo inglés formado por Roland Orzabal y Curt Smith gozaba de popularidad por “Songs from the Big Chair”. El segundo álbum de la banda tenía temas como “Shout”, que rápidamente se convirtieron en éxito no solo en las islas británicas, sino también más allá del Atlántico en Estados Unidos.

“Shout” llegó a posicionarse en el primer puesto de los Billboards en tierra del Tío Sam por casi un mes. En ese mismo terruño, 15 años después, Disturbed reversionaría este clásico del pop ochentoso en su primer disco. “The Sickness” llegaría al mercado en marzo del 2000, y dentro de la lista de temas se incluyó un cover de este clásico rebautizado: “Shout 2000”.

Pero volvamos un poco al origen y significado de la letra. Se ha deslizado por muchos medios que la lírica podría estar referida a la guerra fría, que si bien estaba por concluir, todavía permanecía en pie. Dentro de esta teoría, los “gritos” a los que el dúo británico se refería eran a los de sublevación ante un estado de quietud a la que gran parte de la población europea pertenecía en aquella época. Más allá del enfoque social al que se la vinculó, lo cierto es que Smith explicó que se trataba de un método de psicoterapia denominado primal, creada por el psicólogo norteamericano Arthur Janov, que consistía en gritar para liberar los miedos internos.

Hacia fines de los 90’s y principio de los 2000’s el Nu metal gozó de popularidad como nunca antes y bandas como Disturbed empezaron a darse a conocer en ese círculo. “Shout 2000” fue uno de los clásicos que dejó “The Sickness” junto a “Stupify” y “Down with the Sickness”. Lejos de la guerra fría y las psicoterapias, el vocalista de la banda, David Draiman, reconoció: “‘Shout 2000’ era una forma de demostrar nuestra actitud hacia la escena de aquel momento y no había mejor forma que hacerlo a los gritos’’. El conjunto estadounidense ha incluido varios covers en sus títulos de estudio a lo largo de su trayectoria, caso de “Land of Confusion” de Genesis o “The Sound of Silence” de Simon & Garfunkel, pero lo cierto es que este fue el inicio de esa modalidad. Si bien Tears for Fears y Disturbed nunca tendrán que ver en lo musical, de vez en cuando hay líneas paralelas que se terminan cruzando.