Crónica: Roberto Isa / Fotos: Maru Debiassi
El quinteto desplegó su heavy metal tradicional con un enérgico show, en lo que fue su segunda visita al país.
Originadas en Suiza, las Burning Witches llevan una década recorriendo los principales escenarios del mundo, siendo habitúes de los mayores festivales europeos y cosechando elogios por sus sólidas presentaciones en vivo, donde despliegan un fresco repaso por los sagrados mandamientos del más clásico heavy metal. Actualmente, se encuentran girando a modo de presentación de “The Dark Tower”, su último disco de estudio, editado en 2023. Con esta premisa ofrecieron su primer show como acto principal en Buenos Aires (ya que habían sido apertura de Destruction en 2022), con la fecha pautada para el sábado 10 de mayo en Uniclub.
InnerForce y Caustic fueron los créditos locales encargados de abrir la noche, y para cuando el horario del evento central se acercaba, las instalaciones del lugar ya lucían con un marco acorde para la cita. Las Brujas salieron al escenario con “Unleash the Beast”, de su reciente álbum, continuando de inmediato con “Dance With The Devil”, ya un clásico para sus fans, que entregaron los primeros pogos de la noche, como también lo harían seguidamente con “Maiden of Steel”, otro de los favoritos de sus seguidores.
La banda se mostró enérgica en todo momento y, sobre todo, sorprendida con la euforia el público local. Laura Guldemond, la front woman, intercambió divertidos momentos con la audiencia, tratando de emular el característico “olé, olé” tan común a nuestros oídos. Sobre la cantante, solo se pueden ofrecer elogios: es una fuerza arrolladora en vivo, sustentada por una voz de registro poderoso y una presencia escénica muy bien llevada. Prueba de ello fueron los estribillos de “Spell of the Skull”, donde su voz alcanza niveles brillantes, secundada por la destreza de Courtney Cox en las seis cuerdas. La guitarrista, conocida por el público metalero desde su participación en The Iron Maidens, ingresó a Burning Witches en 2023, aportando su técnica depurada en la ejecución del instrumento. En un rol también importante sostienen al grupo la bajista Jeanine Grob y la baterista Lala Frischknecht, presentes en el grupo desde sus inicios, junto a la guitarrista rítmica Simone Van Straten, reemplazante temporal de Romana Kalkuhl, fundadora de la banda en ausencia por maternidad.
El riff thashero de “Black Widow” y la pesadez de “Hexenhammer” amenazaron con demoler Uniclub, tanto por lo ajustada de la ejecución de parte de la banda como de la gran respuesta del público, logrando despertar sorpresas en todas las integrantes del quinteto ante la efusividad de sus fans argentinos. A pedido de Guldemond, las luces de los celulares se encendieron para “Flight of the Valkiries”, la única balada (la primera parte del tema, al menos) presente en la lista, con logrados pasajes de guitarras y melodía, justo antes de que el heavy metal en su vena más tradicional regrese de la mano de “The Witch of the North”, “Lucid Nightmare” y el homónimo “Burning Witches” como cierre de la función. Luego, la tradicional foto de la banda con el público y más, ya que al finalizar se tomaron un momento para saludar y sacarse fotos con los fans allí presentes. Espectadores y banda se retiraron felices por igual, luego de una gran noche del más puro metal.











